Alejandro Durendes, gerente de FIDAS, acudió este jueves, 7 de octubre a las 12 horas, al acto de colocación de una placa Docomomo en la escuela infantil María Inmaculada, situada tras la muralla del Alcázar de Sevilla, un enclave privilegiado que oculta una arquitectura moderna digna de este reconocimiento internacional.
Al acto, que se enmarca en la agenda de la XX Semana de la Arquitectura de Sevilla organizada por el COAS y en la que FIDAS colabora, ha acudido además Cristina Murillo, decana del Colegio de Arquitectos de Sevilla (COAS); Juanma G. Nieto, vocal de Actividades del COAS; María José Eslava Nieto, Delegada Territorial de Educación y Deporte en Sevilla; Isabel Rodríguez Rodríguez, directora del Real Alcázar de Sevilla y Juan José Primo, director del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH).
Esta placa, otorgada por la Fundación Docomomo Ibérico, busca distinguir la arquitectura del movimiento moderno, que es parte de nuestra cultura del siglo XX, su protección patrimonial y conservación.
Es por ello que el Colegio Oficial de Arquitectos de Sevilla ha querido distinguir este espacio construido en 1937. Un edificio que resultó de una intervención singular y atrevida, ya que inicialmente iba a ser destinado a las cocheras del Alcázar. Se trata, por tanto, de una construcción con estructura de hormigón adelantada a su época que se convirtió en escuela maternal, hoy guardería, a través de un lenguaje limpio yen un enclave extraordinario.
El autor de este proyecto fue el arquitecto municipal de Sevilla, Juan Talavera, a quien este jueves se le reconoce su labor arquitectónica capaz de saltar de estilos con facilidad asombrosa, y uno de los mayores defensores de la arquitectura del movimiento moderno de Sevilla.